Hace ya varios ayeres, decidí suspender mis actividades como docente. Tres años se pasaron volando. Como la vida misma.
Las razones fueron muchas. Cada una con un peso específico
y con la importancia necesaria para aceptarlas. Y en ese entonces decidí hacer “una breve pausa”.
Hoy, son muchas más las razones por las que he decidido
regresar a las aulas para este 2021. La vida es de metas y retos y así me he
trazado a la docencia para este año que está por comenzar y dar continuidad a lo que como catedrático inicié en 1997, año en el que por vez primera estuve frente a un grupo de universitarios.
Siempre he creído en la docencia para transformar
realidades. La veo como el arma más noble pero más valiosa.
Creo que es en las juventudes en donde existe la esperanza
de que todo cambie. De que, al compartir información con él o la estudiante, ambos
puedan llenar su mochila profesional y enfrentarse a lo que Chiapas y México exige
día a día.
La docencia es algo que me apasiona. Que me nutre. Que me
exige al actualizar mis conocimientos para estar a la altura de lo que los padres
de familia esperan que sus hijos o hijas reciban en la universidad.
Que me hace sumar esfuerzos con mis colegas docentes para
hacer un frente académico único, ese que esté coordinado por los temas a tratar
en un mismo grado universitario y no ser simples merolicos de conceptos bibliográficos.
No, esa no es la docencia.
La docencia debe ser comprometida, responsable y hasta
congruente. No coincido con aquellos que, en las aulas, comparten información que nunca han
practicado. Conocimiento y experiencia profesional. Sumas que siempre darán resultados
positivos.
Por ello estoy aquí, insistiendo nuevamente. Siendo un férreo o un necio catedrático por
pretender sumarme a una institución educativa para proponer elementos en la
preparación y formación de los universitarios.
Queriendo nuevamente aportar para ellos, para los que en un
futuro muy cercano, habrán de seguir construyendo el Chiapas que, seguro estoy,
todos queremos.
Bienvenido 2021, en donde el aula presencial o virtual
me permita unirme al talento y convicción que académicos y estudiantes poseen
en Chiapas.